Ubicado en Lalande de Pomerol, junto a la ruta nacional 89, Château Moulin La Gravière abarca 4,5 hectáreas de suelo arenoso y gravoso, beneficiado por un microclima excepcional. Su composición varietal combina 80% Merlot para aportar cuerpo y fruta, y 20% Cabernet Franc que suma redondez y suavidad.
El viñedo, trabajado con la misma precisión que los grandes vinos de Pomerol, sigue un proceso artesanal: vendimia manual en cajas de 12 kg, selección rigurosa y vinificación en tanques de acero inoxidable con control de temperatura. La crianza se realiza durante 14 meses en barricas de un año, logrando vinos seductores y gastronómicos.
Con una producción limitada a 21.000 botellas, Château Moulin La Gravière es sinónimo de equilibrio, elegancia y placer inmediato.